Buenos días,

El lunes pasado, día 10 de enero, abordábamos en el Trazo de Kalamos correspondiente para aquel día el cambio que habíamos observado en China respecto a África, y hablábamos también de infraestructura, férrea entre otras, y de la deuda africana en manos de China, de la acometida del Reino Unido como país que más va a invertir del G7 en África este 2022, etcétera. Repasar ese Trazo de Kalamos será fundamental, pues en él hablábamos de pasada para poder abordarlo con una mayor perspectiva la entrada de Marruecos en las nuevas rutas de la seda en África.

A principios de este año 2022, el miércoles día 5 de enero, Marruecos y China firmaban a través de Nasser Bourita, el ministro de Relaciones Exteriores de Marruecos, y Ning Jizhe, el economista y alto funcionario chino, que actualmente se desempeña como vicepresidente de la Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo de China, el plan conjunto de implementación de la Franja y la Ruta.

Cuando se implemente, el acuerdo debería ver a las dos naciones crear empresas conjuntas en la industria energética. China también promete alentar a las empresas chinas a invertir en Marruecos al tiempo que otorga fondos para grandes proyectos de desarrollo en el país africano. Marruecos fue el primer país magrebí en adherirse a la iniciativa de la Franja y la Ruta. De hecho, el convenio firmado por Marruecos y China también prevé incluir a África para formar una cooperación tripartita en el sector del desarrollo sostenible.

Las relaciones entre Marruecos y China en los últimos cinco años han experimentado un aumento significativo en términos comerciales, entre otros. En 2016, durante una visita del gobernante marroquí Mohammed VI a Beijing, ambos países firmaron una serie de acuerdos preparatorios, comenzando con la relajación de las restricciones de visado para ciudadanos chinos.

En 2017, Marruecos pasaba a ser el primer país de África Occidental en firmar el memorando de entendimiento sobre las rutas de la seda, y la reacción de Washington no se hizo esperar para intentar atraer más a Rabat a su órbita, reconociendo su soberanía sobre el Sáhara Occidental en diciembre de 2020, en el contexto de los pactos de Abraham, cosa que llevó a que las relaciones con Israel se normalizaran en ese contexto, a pesar de las buenas relaciones entre ambos países existentes desde hace décadas. Estos acontecimientos escalaron las relaciones con la vecina y rival Argelia, uno de los principales aliados de China en la región.

No obstante, a partir de 2017 el comercio entre China y Marruecos ha arrojado un saldo de crecimiento de alrededor de un 50%, cosa que ha permitido a Beijing ir ganando influencia cerca del Estrecho de Gibraltar, donde Estados Unidos tiene presencia militar a través de las bases aliadas de Rota (España/Estados Unidos) y la de Gibraltar (Reino Unido). Esto sería otro factor más a sumar al juego que sitúa a Marruecos como proxy de Israel en su nueva Guerra Fría, al estilo de la Guerra Fría entre Arabia Saudita e Irán, con este último país, aspectos que hemos abordado a través de diferentes Trazos de Kalamos, en concreto: en este, este otro y este último.

China se centra hasta ahora especialmente en la zona de Tánger, con su puerto, principal hub de distribución de mercancías del continente, y uno de los puntos de unión entre Europa y África y los tres corredores euroafricanos. De nuevo, China sigue la misma estratagema que con Rusia en el Caspio o con el Ártico: "ocupar el cuerpo" que se crea por parte de otros y usarlo en su propio beneficio, en este caso, multidireccionalmente, pues apuntan tanto a Europa como a África, tanto al Cáucaso como a Oriente Medio proyectándose de nuevo vía Siria a por el puerto de Beirut (de nuevo, Rusia hace el esfuerzo, en Siria en este caso, y China acude a explotar en su beneficio lo que Rusia ha construido).

El 8 de julio de 2021, se nos informaba que China pasaba a ser el mayor accionista del megaproyecto Cité Mohammed VI TANGER TECH ya que el consejo regional local cede el 20% a CCCC / CRBC de China; quedando el 35% en manos de CCCC / CRBC, el 25% controlado por el Banco de África, un 20% en manos del Consejo Regional Tánger-Tetuán-Alhucemas y el 20% controlado por la Agencia Especial Tanger Med (TMSA).

En noviembre, ambos países alcanzaron a un acuerdo sobre una participación del 35% reservada a empresas chinas para la construcción del nuevo polo tecnológico Cité Mohammed VI TANGER TECH en la ciudad de Ain Dalia, un proyecto valorado en unos 10.000 millones de dólares. Se trata de una ciudad inteligente cuyo proyecto lanzó el Rey Mohammed VI en marzo de 2017. El sitio de 200 hectáreas se completará en 2027.

China está contribuyendo con aproximadamente $ 1 mil millones para financiar el proyecto y casi 200 empresas chinas anunciaron previamente su intención de establecer ubicaciones en Cité Mohammed VI TANGER TECH.

Las partes que firmaron los acuerdos incluyen la Compañía de Construcción de Comunicaciones de China (CCCC), la Corporación de Carreteras y Puentes de China (CRBC), la Agencia Especial Tanger Med y el Banco de África de Marruecos (BMCE).

En virtud de los acuerdos, CCCC y su filial CRBC han formalizado su participación en el capital de Tangier Tech Management Company (SATT). Las corporaciones chinas poseen el 35% del capital de la empresa. SATT es la empresa responsable de la construcción y gestión de la Cité Mohammed VI TANGER TECH. Entre sus accionistas se encuentran el Consejo Regional de Tánger-Tetuán-Alhucemas, el Banco BMCE y la Agencia Especial Tanger Med.

Por su parte, el operador chino de energía eólica Aeolon anunció su intención de abrir una planta en Mohammed VI Tangier Tech City. La empresa expresó su disposición a invertir $140 millones en la ciudad inteligente y crear 2.000 puestos de trabajo. Otras empresas chinas que anunciaron su intención de establecer fábricas en Cité Mohammed VI TANGER TECH operan en los campos de la automoción, aeroespacial, textil, electrónica y maquinaria.

China está buscando los resquicios que pueda encontrar en una aproximación descoordinada por parte de la Unión Europea en la región a través de les tres corredores euroafricanos y en general, en su aproximación hacia África. Así que aquí China ha encontrado la relación quid pro quo que estaba buscando para avanzar posiciones. A esto hay que añadir el dominio en África del 5G de China y el impulso de su tecnología a la hora de captar inteligencia y de generar una expansión de datos, de tal forma que es cuando los datos valen más dinero que nunca y estos se van a expandir, tal y como señalé en este dossier. El coste marginal con tendencia a cero, la Revolución Industrial 4.0 y todo lo que trae aparejado hacen que la demografía, la creación de una nutrida clase media según nuevos parámetros de la nueva industrialización y que, en definitiva, la población adquiera una importancia de nuevo muy relevante, precisamente la caída de población que aguarda a China, además de arrostrar una sociedad muy envejecida y perder muchos millones de habitantes justo cuando más necesarios serían, a pesar de elevar a 3 el número de hijos por matrimonio, vemos que, de acuerdo con los propios datos de China, pierde población a un nivel mayor del esperado, de modo que precisan "recuperar" y aumentar esos números precisamente donde la demografía y el crecimiento económico acompañado de la Revolución Industrial 4.0 puede ser más prometedor, ocupando recursos minerales, demográficos, humanos, geoestratégicos, datos provenientes del Internet de las cosas, el Internet industrial, el Internet asociado a las personas y sus actividades, datos en definitiva de primera magnitud, y busca valerse de todo ello y, desde luego, arrebatárselo a los competidores para obligarles a pagar por el acceso a ese espacio imperial, lo mismo que cada gran competidor. En definitiva,

1/ Los datos valen dinero... y son parte intrínseca del nuevo dinero digital

2/ La economía de las ciudades o clústeres de ciudades generan datos y concentrarán la actividad industrial especializada

3/ La Inteligencia Artificial es la tercera parte y elemento conector e impulsor junto al 5G, en este momento, en un contexto de una nueva y disruptiva Revolución Industrial

Quien domina las tres partes, además de los minerales y otros elementos críticos como comida, agua, gas y energía infinita, domina el mundo.

El objetivo de Rabat es utilizar a Beijing en la medida de lo posible precisamente para aliviar la presión de Argelia. Aunque China siempre se ha mantenido equidistante en la diatriba marroquí-argelina sobre el Sáhara Occidental, la intención de Marruecos es canalizar los esfuerzos por nuevas rutas de la seda para construir vías férreas hacia las regiones del sur, con el fin de unir el Sáhara Occidental con el resto del país, algo que ya empezó a hacer con Francia. Ya sea mediante la construcción, a través de créditos chinos, de una terminal de gas natural licuado, sobre la que Rabat está reiniciando su trisector energético desde que en octubre Argelia le privó del paso del gasoducto Magreb-Europa.

Respecto a la construcción de línea férrea, la línea de alta velocidad entre Tánger y Casablanca fue inaugurada el jueves 15 de noviembre de 2018, la realización de la “TAV Marroquí” trasciende el plano interno y encaja en las relaciones con París, que está bien dispuesta a invertir en una infraestructura que muestra sus habilidades de ingeniería, no sólo para Marruecos, pues se postula para toda África, de ahí que Francia financiase esa obra en aproximadamente un 50% del total, de los que se donaron 75 millones de euros. Las principales empresas francesas del sector ferroviario (Alstom, Systra, Thales, SNCF, etcétera) participaron en primera fila en la concepción e implementación del proyecto.

En este momento, en el que asistimos a la reconstrucción de las infraestructuras ferroviarias heredadas del colonialismo para permitir un desarrollo económico que pase también por las vías, se enmarcaba, y se enmarca ahora, la política de persuasión dirigida a la Françafrique subsahariana, cuya cabeza de puente está flanqueada por el fortalecimiento de la posición en el Magreb, donde París, al mismo tiempo que capitaliza el vínculo histórico con las antiguas posesiones en el norte de África, se enfrenta a la competencia de otros actores, pero más allá de Turquía, o Rusia en algunos aspectos ciertamente relevantes, y donde acabará sucediendo lo mismo que en Siria, es decir que el esfuerzo lo hará Moscú, pero los frutos los recogerá otro actor, que es el que está ante todo jugando (incluyendo deuda para capturar países y recursos, tal y como hemos señalado) y que no es otro que Beijing. Marruecos, también por su parte, es consciente del hecho de diversificar... pero para asociarse con el ganador del juego y proyectarse juntos, en la medida de lo posible, en el desarrollo subsahariano.

Cálculos que necesariamente deben tener en cuenta la opinión estadounidense. De hecho, Marruecos sigue siendo un país decisivo para Washington a la hora de presidir el espacio entre el África subsahariana y el Occidente de Europa. Y es que Estados Unidos es la mayor potencia del Magreb. El único actor que tiene tropas e instalaciones militares en todos los países de la región, que controla tanto el Estrecho de Gibraltar como el Canal de Suez , el único que actúa con prontitud en una dimensión estratégica, y que se necesita con Francia y Francia se necesita con Estados Unidos y el Reino Unido en todas las dimensiones, replanteando el papel de una Alemania que llama a cambiar su pensamiento estratégico, nulo hasta ahora, para hacerse valer ante Washington y siguiendo la estela de Polonia, que lo comprendió mejor y que se halla en una situación más propicia, mientras Alemania sigue sin comprender exactamente el juego del Nord Stream 2, y que ya hemos señalado aquí.

Desde hace algunos años, China y Rusia tienen la intención de anular esta condición. Beijing intenta reemplazar a su rival conectando las rutas marítimas de la seda con Egipto, invirtiendo fuertemente en las naciones locales, comprando sus hidrocarburos. Sin poder romper el statu quo Moscú intenta utilizar el norte de África para obligar a los estadounidenses a hacer concesiones en expedientes europeos y caucásicos cruciales, obstaculizando sus planes, poniéndose del lado del frente opuesto, vendiendo armamentos a los gobiernos nativos... estos escenarios se van a transformar: al igual que la cooperación con Francia y Estados Unidos va a ser mayor y va a ir en aumento por sus visiones e intereses, Rusia buscará la efectividad y dejar de beneficiar a su costa a Beijing... quizás la vía sea para Moscú más que Berlín, París, Washington y Londres...

Hasta aquí el Trazo de Kalamos de hoy. Muchas gracias por su atención e interés. Recuerden compartir el comentario si les ha interesado y seguirnos en nuestras redes sociales.