Continuando con la anunciada nueva iniciativa hace una semana, paso a dejar el primer artículo que desarrolla el papel del llamado "conflicto que permite construir una primera hegemonía", y que pone las bases de la República imperialista y su transición hacia el Imperio, en este caso se trata de las Guerras Púnicas, particularmente el primero de estos conflictos marcó un cambio en el posicionamiento geoestratégico y el segundo en su conclusión implicó la puesta en marcha definitiva de ese giro conceptual. Este elemento merece también un comentario sobre la forma en que Italia se ha venido concibiendo desde la reunificación, y particularmente con la gestación del proceso que ha conducido a la Unión Europea y al fracaso del eje franco-alemán. Es decir, Italia ha vivido el clásico proceso histórico de mirar hacia el interior y no hacia el mar, y de mirar hacia el norte y no tener una visión multidimensional que es la que la define y la hace más fuerte. En este sentido, la muy peculiar visión kantiana de Alemania ha ejercido una influencia en Italia que ya con el ejecutivo Conte trató de empezar a matizar aunque con una mala lectura geoestratégica. El contexto actual invita a un nuevo giro de tuerca en la visión de Italia, España, el Mediterráneo y otras regiones de la vecindad estratégica inmediata, y más allá, como explico sucintamente situándolo en el contexto estudiado en el siguiente enlace.  

Advancing with the new initiative announced a week ago, I will present the first paper that develops the role of the so-called "conflict that allows the construction of a first hegemony", and that lays the foundations of the imperialist Republic and its transition to the Empire, in this case the Punic Wars, particularly the first of these conflicts marked a change in the geostrategic positioning and the second in its conclusion implied the definitive implementation of this conceptual shift. This element also deserves a comment on the way Italy has been conceiving itself since reunification, and particularly with the gestation of the process that has led to the European Union and the failure of the Franco-German axis. In other words, Italy has gone through the classic historical process of looking inwards and not towards the sea, and of looking northwards and not having a multidimensional vision that defines it and makes it stronger. In this sense, the very peculiar Kantian vision of Germany has exerted an influence on Italy that already with the executive Conte tried to begin to nuance although with a geostrategic misreading. The current context invites a new turn of the screw in the vision of Italy, Spain, the Mediterranean and other regions of the immediate strategic neighborhood, and beyond, as I explain succinctly placing it in the context studied in the following link.